martes, enero 31, 2006

llegaba la noche ...

...y de pronto la luna se convirtió en hombre y bajó montado en una estrella hasta mi puerta...
... y de pronto la belleza se hizó hombre, tenía hermosos rizos y grandes ojos que se hacían chiquitos...
... y de pronto la sabiduría se hizó hombre y me dijo: -eres grande!-...
... y de pronto la soledad se hizó mujer y decidió huir por siempre, llevándose a mi luna, mi belleza y mi sabiduria en sus brazos de fuego...
... y de pronto desperté, y me había convertido en el tiempo.

3 comentarios:

JACQUEL (antes wrutuu88uu) dijo...

lo intentaré

Kaleidoscopico dijo...

quiero qu el sol se vuelva mujer y entre a despertarme por la mañana...con un beso.

Josué dijo...

La soledad no necesariamente es mala.