miércoles, abril 14, 2010

I´m dissapointed

Y es que cada que me acuerdo vuelvo a llorar.


Dormía plácidamente en la mañana mientras soñaba con un desastre, Pulque me miraba fijamente y corría de un lado a otro de la cama con la intención de despertarme: Lo logró y me levanté a abrirle la puerta; entraba y salía como loco, corría y se derrapaba por intentar frenar. Giré sobre mi hombro a la vez que jalaba la cobija para tratar de dormir una vez más. Más tarde volvió a su intento y nuevamente tuvo suerte entonces me vestí para salir a correr con él como habíamos estado haciendo desde hace unos días.

Al llegar al camellón donde solíamos correr lo solté, me alegró contemplarlo siendo feliz y libre, pero de pronto un perro pequeño apareció como por arte de mágia y el estúpido pulque corrio hacia él con la firme intención de madrearlo. Le grité tan fuerte como pude, pero no me hizo caso, entonces fuí corriendo lo más rápido que pude para intentar salvar al perrito (han de saber que pulque es un weimaraner de 30 kilos) y sí, así pasó el perro pequeño pudo librarse y correr, pero pulque tenía muchas ganas de comerselo y se me soltó de las manos. Corrió a toda prisa intentando alcanzarlo, volví a gritarle y a correr detrás de él y trato de cruzar la calle; Una puta gorda manejaba su camioneta a unos metros de distancia de ambos perros, pudo haber frenado sí hubiera querido, pero no, LA GRAN HIJA DE PUTA siguió de frente y golpeo a pulque lanzandolo vehementemente al suelo. No se detuvo antes y tampoco después, lo dejó ahí tirado y se fue, pude ver su espantoso rostro por el espejo lateral de su puerta y su expresión fue de desinterés. En ese momento no sentí nada en contra de ella, ni siquiera pude gritarle que fuera a chingar a su madre o "pinche vieja", nada. Lo único que quería era saber si pulque estaba bien. Los vecinos salieron tras escuchar el golpe, pero no a tratar de ayudar, salieron porque su morbo se los pedía.  No entiendo qué clase de satisfacción les da observar a una pobre mujer desesperada por no recibir ningún tipo de ayuda, nadie quiso ayudarme a llevar al perro, los taxistas no quisieron subirme y después de mucho uno aceptó, pero me cobró lo doble que había marcado su taximetro... me decepcioné tanto de todas esas personas con nula empatía, sé que no era su obligación ayudarme, pero por compasión o incluso por interés (les ofrecí dinero)  y nadie hizo nada!!! Me entristece vivir en un lugar tan espantoso como este en donde la vida de un animal no tiene ningún tipo de valor, en donde nadie puede ofrecer apoyo y en donde no pase absolutamente nada.


**Por cierto, pulque sufrió una fractura que con cirugía, reposo y amor podrá librar.