1) salvé la vida de Ignacio (mi perro). mientras escribía un recado en un papel escuché un ruido extraño y ví como nacho movía la mitad de su cuerpo de atrás hacía adelante y tenía el hocico abierto, me levanté rápidamente y le metí el dedo hasta donde pude con el fin de sacar lo que tenía atorado, mi acto dió resultado y vómito un líquido verde y espumoso seguido por una madeja de hilos... corrió hasta su cama como si nada hubiera pasado, así es él: despreocupado.
2) cuando salí por un trapo para limpiar, ví que el agua se caía, corrí a cerrar la llave y así evité que varios litros de agua fueran desperdiciados.
3) un mini-romeo me dijo: hola!, me llamo Aldo, y me dio un papel que decía: "hola, me gustas. atte: aldo", ja!- dije (o pensé), según mi prima es compañero suyo en la primaria, hubiera sido mejor que su hermano o primo me lo hubiera dado... ah! no, ya recorde que he prometido fidelidad.. qué lástima!
4) recibí una llamada de un buen amigo diciendome que aprobé un examen... un peso menos. aunque pensándolo bien, él dijo que no estaba seguro y así como es mi suerte, tal vez no lo pasé... otro peso más.
1 comentario:
si, ese tipo de cosas sin sentido son las mejores.. recibir una llamada por ejemplo, también puede hacerte el día feliz.-... te quiero
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