miércoles, agosto 25, 2010

Rayuela


Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano en tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.



Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mi como una luna en el agua.



Si pudiera describir la sensación de opresión... deliciosa opresión en el pecho que me causa esta combinación, si tan solo pudiera, me convertiría en la mejor escritora del mundo.s

5 comentarios:

L.C. dijo...

Me alegro mucho de que recuperes el blog, besos

Francisco Palacios dijo...

Increíble es la prosa del cronopio. Muy buena musicalización la de Gotan Project, no se qué hubieran hecho de haberse llamado la novela "Mandala" como originalmente la pensó Cortázar, je. Pero es mejor aún lo que escribes al final, esa opresión causada por esa combinación (sin decir cuál exactamente), ese palpitar que nos hace sentir lo que dice Julio en el capítulo siete. Gritar de placer ahogándonos, reprimiendo el grito, mordiendo los labios ajenos para no explotar y explotando finalmente en ese temblor de la luna en el agua...
Ya me proyecté.
Te amo

Gota de tinta dijo...

que bonito!! me gusto la poesia, el tango, los ninos cantando...y las cosas que escribes, son muy bellas, reales, romanticas sin ser cursis.

Te quiero mucho, mil besos

Carlos dijo...

Que bello

Jimena dijo...

El capítulo más gustado (creo) por los lectores cursis de Rayuela, (incluyendome). ¡Cortazar!